USM Haller
USM – «Ulrich Schärer Münsingen» – es sinónimo de diseño intemporal y excelente calidad. La exitosa empresa suiza de sistemas modulares de muebles USM U. Schärer Söhne AG cuenta en su sede central en Suiza y en sus filiales en Alemania, Francia y EE.UU. con unos 400 empleados. El fabricante con producción en Suiza está presente en más de 30 países a través de sus socios de distribución.
La historia de éxito de esta empresa familiar se inició en 1885 con una ferretería y cerrajería establecida en la localidad de Münsingen, cerca de Berna (CH), todavía muy alejada del diseño y de la construcción de muebles. En los años 20, la empresa se convirtió en una pequeña fábrica especializada en la producción de herrajes para ventanas. Después de la segunda guerra mundial amplió su abanico de productos a la construcción metálica y de chapa. A comienzos de la década de los 60, con la llegada a la empresa del ingeniero Paul Schärer júnior, ingeniero diplomado por la Universidad Politécnica de Zúrich, se dio el paso decisivo hacia una moderna empresa industrial de diseño con la construcción de la nueva fábrica. El proyecto fue confiado al arquitecto Fritz Haller, quien por entonces tenía su estudio en Soleura (CH) y que más tarde sería Profesor honoris causa por la Universidad de Karlsruhe (D). El edificio funcional basado en un sistema de construcción metálica fue concebido con una orientación totalmente neutral que permitía ampliarlo en cualquier momento según las necesidades empresariales. Sería el modelo de inspiración del fascinante Sistema modular USM Haller que Paul Schärer desarrolló con Fritz Haller en un principio para su propio uso, trasladando el concepto de macro a microescala.
El Sistema modular USM Haller fue lanzado al mercado en 1965 y se ha convertido en un modelo de diseño intemporal reconocido mundialmente. En 1988 se decidió por primera vez en Alemania que el Sistema modular USM Haller era una obra de arte aplicada y que debía estar protegido por derechos de propiedad intelectual. A fines de 2001 fue aceptado para formar parte de la Colección de Diseño del Museo de Arte Moderno – MOMA – de Nueva York (EE.UU.). Esta alta distinción confirma el carácter de obra de arte de este producto que es hoy todo un clásico y que se usa para amueblar oficinas, edificios públicos y hogares.
